Perfil Bioquímico: Es una serie de estudios que valoran la función de algunos órganos, como el riñón (Nitrógeno Ureico, Urea, Creatinina, Electrolitos), Pruebas de Función Hepática (Bilirrubinas, Transaminasas, Proteínas, Fosfatasa alkalina), Acido Úrico, y colesterol, entre otros.
La importancia de realizar el perfil bioquímico completo consiste en detectar las enfermedades más frecuentes tales como: diabetes, mellitus, insuficiencia renal, riesgo coronario, problemas hepáticos y gota.
Los electrolitos pueden incluir el sodio, el potasio, el cloruro, el bicarbonato, el calcio, el fósforo y el magnesio. Medir los electrolitos puede indicar específicamente ciertos trastornos metabólicos.
Las enzimas son liberadas dentro de la sangre por los órganos que están lesionados o enfermos. Los tipos de enzimas que se liberan pueden indicar cuál es el órgano afectado.
Las hormonas son secretadas por las diversas glándulas endocrinas. Los niveles elevados o muy bajos de ciertas hormonas pueden indicar demasiada o muy poca actividad en dichas glándulas.
Los lípidos son sustancias grasas como los triglicéridos (grasa que se almacena a nivel de arterias produciendo los llamados ateromas y el colesterol es la grasa que se almacena en las arterias coronarias. Los lípidos pueden ayudar a indicar la cardiopatía coronaria y ayuda a prevenir el infarto.